Esta semana he acabado de leer un interesante libro que quería comentar con vosotros/as hoy. Se llama “El valor de la atención” de Johann Hari.
¿Cuántos/as de nosotros/as nos quejamos de que hemos perdido mucha memoria, de que nos cuesta centrarnos y prestar atención durante más de apenas unos minutos, de que ya no podemos leer un libro como antes durante horas e incluso ver una película entera sin distraernos en otras cosas?. ¿Quién no conoce a niños/as que no aguantan sentados/as en clase como lo hacíamos antes, no pueden estar mucho tiempo delante de un libro ya sea para estudiar o de disfrute, o estar sentados/as en la mesa durante toda la comida sin ponerles una pantalla delante?.
Por otro lado, realizamos muchas tareas a la vez: ver la televisión, contestar whassap, mirar instagram, y comprar algo en amazon, mientras mantenemos una conversación con nuestra pareja de sofá.
Johann Hari tras muchos estudios revela que nuestra atención va empeorando cada década, así como nuestro coeficiente intelectual y son muchos los factores que inciden: comida, contaminación, calidad de sueño, estilo de vida. Dentro de este último factor vamos a analizar en qué hemos cambiado y como las pantallas han disparado el problema.
El profesor Earl Miller dice que “nuestro cerebro está preparado para pensar conscientemente en una sola cosa a la vez, es su limitación fundamental y esto no ha cambiado en los últimos 40000 años”.
Es curioso como las personas caemos en el engaño masivo de creernos que podemos hacer muchas cosas a la vez y nos sentimos orgullosas de ello. Así nuestros/as jóvenes se ponen delante del libro a estudiar con el ordenador, viendo un video en youtube, comentándolo a la vez en un chat y quedando con los/as amigos/as en whasapp. Mientras ven un vídeo de Tik-tok, salen de la habitación a buscar algo que a mitad de camino ya han olvidado que era.
Según el profesor Miller, nuestro cerebro tiene que hacer increíbles esfuerzos para intentar dar respuesta a todas la exigencias que le pedimos, pero el costo para poder realizarlo es muy alto. Esto tiene un nombre y se llama “el costo de la alternancia",
El costo de alternancia consiste en que cuando pedimos a nuestro cerebro que haga muchas cosas a la vez, somos mucho menos competentes, cometemos más errores, tenemos menos memoria, somos menos creativos/as y nos sentimos más frustrados/as y fracasados/as.
Los niveles de ansiedad y estrés también se han disparado en los últimos años incluso a edades cada vez más tempranas. En consulta, los/las psicólogos/as atendemos cada vez a niños/as más pequeños/as que sufren estos síntomas.
Pues bien, en un mundo donde estamos hiperactivados/as, enganchados/as a la pantalla la mayor parte del día y recibiendo cientos de imputs constantemente, al contrario que nuestro teléfono, nuestro cerebro no tiene un botón de OFF, y sigue de forma activa todo el día.
¿Dónde quedaron aquellas tardes de plaza donde las horas se hacían muy largas y el tiempo no corría?
Los/as niños/as y jóvenes de hoy dicen que el tiempo se les pasa muy rápido.
Ahora los/as niños/as salen del colegio, tienen un rato de pantalla, varias actividades extraescolares, un rato de estudio, otro rato de pantalla, y se van a la cama para dormir con la tablet porque sino no se relajan. Este es un ejemplo de los muchos que se dan a lo largo del día.
Los expertos en hacer programas informáticos reconocen que las redes sociales e internet en general está diseñado para aprender de nuestro comportamiento en la red, captar nuestra atención, bombardeándonos con información que saben que nos gusta y mantenernos enganchados todo el día de una cosa a otra.
La adicción a las tecnologías es una pandemia de nuestro siglo que afecta no solo a niños/as y adolescentes sino también a los/as adultos/as.
Hoy en día todo esta en la red, estamos constantemente conectados/as para todo y cualquier información se encuentra a golpe de tecla: conocer las noticias en tiempo real, comunicarnos con los/as amigos/as, hacer planes, organizar viajes, hacer un trabajo, un discurso, tutoriales que nos explican como resolver cualquier duda… Por otro lado, el ocio nos atrapa a través de la pantalla: juegos, plataformas de películas y series, instagram, tiktok…
Es tan variada la oferta y tan fácil su acceso que las horas se consumen delante de las pantallas, cambiando de una cosa a otra en muy poco tiempo y sin centrarnos realmente en ninguna de ellas.
Cuando al final analizamos qué hemos hecho, no llegamos a ninguna conclusión. Nada realmente salvo perder mucho tiempo. Pero han pasado más cosas que perder el tiempo. Este ir y devenir de una cosa a otra nos ha traído un problema aún mayor, y es la pérdida de la capacidad de atención y memoria. Este deterioro de nuestra capacidad es un fenómeno que debemos atender para poner los mecanismos necesarios que frenen esta pandemia.
No debemos caer en una explicación simplista, hemos visto que hay muchos factores que están influyendo en esto y deben ser abordados en su totalidad, las pantallas solo han acelerado estos procesos. No están en nuestras manos muchos de ellos, pero los grandes cambios empiezan por cambios pequeños e individuales.
Nuestro Equipo de psicología, TAKTIKA, puede analizar cada caso de forma personalizada, abordar este problema y dotar a los/as adultos/as, niños/as y/o la familia de herramientas para hacer frente a este problema para recuperar y mejorar la atención de la persona.
Marian Molina. Psicóloga en Lorca.
Equipo TAKTIKA. Región de Murcia.
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